Por: Kelvin Arias
En la República Dominicana, el debate sobre la construcción de nuevas cárceles ha vuelto a tomar fuerza. Sin embargo, es hora de preguntarnos: ¿estamos realmente abordando el problema de raíz? ¿Estamos trabajando para prevenir la delincuencia y ofrecer oportunidades a nuestros jóvenes, o simplemente estamos enfocándonos en encerrar a aquellos que ya han caído en la delincuencia?
La construcción de cárceles puede ser una solución a corto plazo, pero no es la respuesta definitiva para erradicar la delincuencia en nuestro país. Es hora de cambiar el enfoque y empezar a hablar de prevención. Es hora de invertir en nuestros jóvenes y ofrecerles oportunidades para que puedan desarrollar sus habilidades y alcanzar sus sueños.
La delincuencia es un problema complejo que tiene raíces profundas en la sociedad. La pobreza, la falta de educación y la falta de oportunidades son solo algunas de las causas que llevan a muchos jóvenes a caer en la delincuencia. Por lo tanto, es fundamental que trabajemos para abordar estas causas y ofrecer soluciones efectivas.
Uno de los primeros pasos para prevenir la delincuencia es ofrecer oportunidades para que nuestros jóvenes se desarrollen de manera saludable. La creación de clubes y programas de deportes es una excelente manera de lograr esto. Los deportes no solo ofrecen una salida saludable para la energía y la competitividad de los jóvenes, sino que también les enseñan valiosas habilidades como el trabajo en equipo, la disciplina y la resiliencia.
Además, es fundamental que trabajemos para acabar con los puntos de drogas que proliferan en nuestros barrios y comunidades. La droga es una de las principales causas de la delincuencia y la violencia en nuestro país, y es hora de tomar medidas efectivas para erradicarla.
La prevención también requiere un enfoque integral que involucre a la comunidad, las escuelas y las familias. Es fundamental que trabajemos juntos para ofrecer apoyo y recursos a aquellos que más lo necesitan, y para crear un futuro mejor para nuestro país.