En la lucha que los dominicanos libramos para evitar que siga la propagación del coronavirus, sobre todo que llegue a la fase en la que la posibilidad de terminar en muerte es alta, hay urgencias clear, hay necesidades que deben ser abordadas de inmediato.
Veamos algunas:
1.-Dotar a los profesionales de salud que lidian con la pandemia, de los guantes, las batas, las máscaras, las gafas y las caretas que les permitan sentirse personalmente seguros.
2.-Permitir el aislamiento de los lugares donde el virus no ha penetrado, empezando por las cinco provincias que permanecen sin casos, como son El Seibo, Baoruco, Dajabón, Elías Piña y San José de Ocoa. Algo similar pudiera hacerse con las provincias donde apenas hay dos casos, como Independencia, Monte Cristi, Pedernales y Monte Plata, y en otras que cuentan con un nivel bajísimo de presencia del mortal virus. Defender a quienes, por la razón que fuere, se han librado de esta pandemia debe ser una estrategia de las autoridades que diseñan los planes en ejecución.
3.-En el otro extremo, debe ser una urgencia aislar a las poblaciones humanas convertidas en focos de contagio. Las autoridades vienen mencionando desde el primer boletín lugares como el Distrito Nacional y las provincias Santo Domingo, Duarte y Santiago como lugares donde están concentrados el 75% de los contagiados con el virus. Se cae de la mata, entonces, que en esos sitios debe haber una estrategia de trabajo diferente al resto de las provincias. Y esta estrategia debe empezar por un aislamiento que implique ubicar y acordonar, al interior de cada provincia, los focos mayores de contaminación.
4.- Otra urgencia, la última de estas notas editoriales, debe ser enfocada a observar con detenimiento dónde están ocurriendo las muertes y actuar en consecuencia. Según el boletín especial de Salud Pública número 11, las defunciones comprobadas suman 42. El mismo documento permite saber que 38 de esas muertes, es decir, el 90%, se registró en el Distrito Nacional y cinco provincias: Duarte, Santo Domingo, Sánchez Ramírez y Santiago. ¿Qué nos pueden indicar estas informaciones?
En principio, toda política de suministro de insumos, provisión de medicamentos, materiales de protección y rotación del personal de salud tiene que tomar en cuenta esta realidad tan asimétrica.
Fuente: Hoy.com.do
